Morelia, Michoacán, a de de 2011-10-26

Celebran 70 años de realizar investigación científica

Autor: UNAM vinculación

Celebran 70 años de realizar investigación científica por el conocimiento de la diversidad vegetal en México

  • La Sociedad Botánica de México, una de las más consolidadas en el país y en Latinoamérica
  • El conocimiento de la diversidad vegetal en México aún no es completo, en promedio se conocen 90 especies nuevas de plantas por año

Con un lleno total el auditorio principal del campus de la Universidad Nacional Autónoma de México en Morelia se realizó un acto académico que conmemoró las primeras siete décadas de estudio de las plantas mexicanas.

El doctor Jorge Meave, quien preside la Sociedad Botánica de México actualmente, hizo un recorrido histórico por los principales logros y acontecimientos de la Sociedad.  Las principales actividades que esta Sociedad se planteó realizar desde 1941, año de su fundación,  fue crear herbarios, principales repositorios de la flora mexicana, organizar conferencias sobre diversos temas vegetales y difundir el conocimiento generado por los especialistas a través de distintas publicaciones.

Meave se refirió al Boletín de la Sociedad Botánica de México como la construcción de una tradición científica centenaria, que desde 1944 cuando se dio a conocer el primer número, ha publicado aspectos importantes de la flora mexicana. Actualmente ésta publicación cuenta con acceso electrónico el cual facilita que las personas interesadas en estos temas conozcan los trabajos que genera la Sociedad.

Por otro lado, Meave destacó otras actividades que realiza la Sociedad como el reconocimiento a investigadores destacados con la Medalla al Mérito Botánico y un certamen de tesis dirigido a los estudiantes mexicanos para motivarlos a que realicen investigaciones relacionadas con el estudio de la diversidad vegetal en México.

Durante la conferencia magistral titulada La geografía de la flora de México, el Doctor José Luis Villaseñor Ríos, presentó un análisis sobre la distribución y cuantificación de la riqueza de especies de la flora mexicana a distintas escalas. El doctor Villaseñor, investigador del Instituto de Biología de la UNAM presentó las tres principales dimensiones en las que un ejemplar botánico es entendido por los diversos especialistas del país. Estas son, la identidad taxonómica, es decir, el nombre de la planta y su clasificación, la dimensión en el tiempo y la dimensión en el espacio o en el territorio en que el ejemplar fue colectado.

En algunos herbarios de nuestro país existen ejemplares hasta de 200 años de antigüedad y forman parte de un acervo histórico y biológico muy importante.

Los estudios que sustentan y dan vida a la Sociedad Botánica de México responden a diversas cuestiones como conocer los esfuerzos de colecta en la flora de México a través de los años. El doctor Villaseñor destacó que en los últimos quince años se han incorporado cinco nuevas familias (grandes agrupaciones taxonómicas) al listado florístico nacional. Entre 1986 y el año 2005 se describieron 71 nuevos géneros de plantas y en promedio, se describen noventa especies nuevas por año lo que suman un poco más de veinticuatro mil taxa reportados a lo largo del territorio nacional. La diversidad de plantas en México se encuentra en un déficit lineano, es decir, se reconoce que aún falta mucho por conocer sobre la diversidad vegetal que no ha sido formalmente descrita y catalogada. Sin embargo, es preocupante que actualmente existe un déficit en especialistas botánicos muy fuerte en el país.

Tras siete décadas de exploraciones y estudios detallados de la diversidad de plantas en el país apenas se alcanza un 17.4% del territorio nacional que ha sido inventariado florísticamente lo cual suma un total de 269 sitios muestreados.

Para clausurar el acto académico, se contó con la presencia del doctor Jerzy Rzedowsky, el botánico más famoso de México quien recordó que en la década de los cincuentas el número de especialistas botánicos no llegaba ni a diez. La Sociedad Botánica de México fue creciendo y enriqueciéndose con el interés y la participación no sólo de biólogos sino de horticultores, agrónomos, ingenieros forestales y aficionados a diversos aspectos de la botánica.

El doctor Rzedowsky recordó también que la atmósfera de trabajo que había en aquel entonces para la botánica mexicana era muy distinto al actual. Con pesar mencionó la desaparición de los herbarios en algunas instituciones como las que tuvo, en su momento,  el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias  y mencionó que algunos otros herbarios están languideciendo en otras instituciones.  En contraste, reconoció que la comunidad de botánicos se ha incrementado en el país e instituciones como el CONACYT y la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) aportan recursos para financiar los costos de las investigaciones.

Finalmente, el doctor Rzedwosky mencionó que “con demasiada frecuencia las modas y los intereses personales nos nublan la vista y nos apartamos más de las normas fundamentales de la sociedad botánica de México” y recordó a los presentes el lema que ha estado vigente por 70 años: “la investigación científica al servicio del pueblo”.