... que las ondas gravitacionales viajan a la velocidad de la luz?   Por: Luis F. Rodríguez Instituto de Radioastronomía y Astrofísica, UNAM       La luz es una de las formas de la radiación electromagnética, junto con las ondas de radio, la radiación infrarroja, la ultravioleta, los rayos X y los rayos gama. Todas las formas de esta radiación viajan a la velocidad de la luz. En 1916 Einstein predijo la existencia de unas ondas de naturaleza distinta: las ondas gravitacionales las cuales,, según su teoría, deberían de viajar también a la velocidad de la luz. Las ondas electromagnéticas se producen cuando una partícula con carga (por ejemplo, un electrón) es acelerada, mientras que las ondas gravitacionales se producen cuando una masa es acelerada. Einstein era pesimista sobre la posibilidad real de detectar ondas gravitacionales. Pero un grupo de astrónomos e ingenieros dedicó las últimas décadas a construir los observatorios LIGO (Observatorio de Ondas Gravitacionales por Interferometría de Láser) y finalmente en 2015 detectaron un primer evento. Este evento fue producido por la fusión de dos hoyos negros, cada uno con masa de aproximadamente 30 veces la del Sol. A esta detección siguieron otras tres, todas involucrando hoyos negros. Las fusiones de hoyos negros tienen la ventaja de que producen ondas gravitacionales relativamente intensas, pero no producen ondas electromagnéticas porque la materia está atrapada dentro de los hoyos negros. Finalmente, el 17 de agosto de 2017 los observatorios LIGO detectaron las ondas gravitacionales provenientes de la fusión de dos estrellas de neutrones.  De manera prácticamente simultánea, el observatorio espacial de rayos gama (las ondas electromagnéticas mas energéticas) FERMI detectó también el evento. El que las ondas gravitacionales y las ondas electromagnéticas hayan llegado al mismo tiempo implica que las ondas gravitacionales viajan a la velocidad de las luz. Posteriormente se detectaron otras formas de radiación electromagnética (luz visible, ondas de radio, etcetera.) en un programa en el que estaban involucrados uno de cada cuatro astrónomos del mundo.    

(Izquierda) Uno de los observatorios LIGO. (Derecha) Imagen artística del observatorio especial de rayos gama FERMI.